domingo, 9 de marzo de 2014

La educación del arte, el arte de la educación.

El arte, no sólo obras pictóricas, sino la música, la fotografía, la escultura, la literatura... la observación, los sentidos y los sentimientos. La sociedad no presta atención a este aspecto importantísimo en el desarrollo de las personas. La educación no solo se debe enfocar en la ciencia, la información, sino que se tiene abrir a algo más, la educación de los sentidos. Apreciar una obra de arte, ya sea en cualquiera de sus variantes, desarrollar la capacidad de expresión desde la más tierna infancia. Pero en lugar de potenciar esto, lo desvalorizamos, desprestigiamos el poder artístico, cuando tiene una gran importancia en la educación. Potenciar aspectos tales como la lógica, el pensamiento abstracto es realmente esencial en el proceso educativo del ser humano, pero, ¿desarrollar la identificación y expresión de sentimientos no lo es?, canalizar estos sentimientos y despertar los sentidos de mil maneras diferentes. El arte es una forma de conocimiento que ha estado acompañando a nuestra especie desde tiempos remotos, no hagamos que se pierda esta pieza básica del potencial humano.